El Nissan Terrano es uno de esos todoterrenos que no necesita presentación entre los amantes del 4×4 clásico. Fuerte, fiable y con una mecánica simple pero efectiva, representa una generación de vehículos diseñados para durar, sin artificios ni electrónica excesiva.
Con una estructura sólida, tracción trasera conectable, reductora y un chasis pensado para resistir, el Terrano destaca por su capacidad real fuera del asfalto. No es un SUV disfrazado de aventurero. Es un 4×4 de verdad, con espíritu de campo y cuerpo de acero.
Sus motores —especialmente las versiones diésel turbo— ofrecen un excelente equilibrio entre fuerza, consumo y durabilidad. Son mecánicas que permiten kilometrajes altos con mantenimiento razonable, lo que lo convierte en una opción muy valorada para rutas largas, trabajos exigentes o escapadas sin plan B.
Estéticamente, el Nissan Terrano conserva una línea cuadrada, limpia y funcional. Una carrocería que envejece bien, sin pretensiones de modernidad, pero con una identidad clara. El interior es sobrio, sin lujos, pero todo está hecho para durar: plásticos duros, mandos simples, buena visibilidad y espacio más que suficiente para uso familiar o profesional.
Hoy en día, el Terrano es una pieza muy buscada en el mercado de segunda mano. Se ha convertido en un clásico funcional, ideal para restaurar, preparar para rutas off-road o simplemente conservar como testimonio de otra forma de hacer coches.
Fiabilidad, fuerza y sencillez: el Nissan Terrano sigue siendo una apuesta segura para quienes buscan un todoterreno auténtico, sin compromisos ni florituras.